¿Qué es la Influenza?
Es una enfermedad respiratoria contagiosa provocada por los virus de la influenza A y B. Puede causar síntomas de formas leves que requerirán manejo general; o un cuadro grave que en ocasiones puede incluso llevar a la muerte. Algunas personas, ya sea en edades extremas de la vida o quienes padezcan ciertas afecciones crónicas, tienen mayor riesgo de sufrir complicaciones graves, como neumonías por otros agentes y empeorar problemas de salud ya existentes. En los niños también puede causar neumonía y dificultad respiratoria. En relación a mortalidad, entre 400 y 500 muertes ocurren anualmente, siendo mayores en las personas de 65 y más años.
Ficha de la Influenza
Período de incubación: 1 a 4 días desde el contacto.
Síntomas:
Fiebre de 38 a 40° con un pick a las 24 horas y duración entre 1 y 5 días.
Dolores musculares.
Dolor de garganta producido al tragar fluidos, frecuentemente como consecuencia de una inflamación de la mucosa esofágica o de los músculos esofágicos.
¿Cómo se contagia?
Persona a persona, a través de gotitas que quedan suspendidas en el aire, después de que un paciente tosa, estornuda o mediante las secreciones nasales. (Contagio por gotitas)
Al tocar objetos contaminados con gotitas provenientes de una persona infectada y se llevan a la boca o nariz sin lavarse previamente las manos.
¿Cómo se previene?
Mantener la higiene en las manos, ya sea con alcohol gel o lavándoselas antes de tocar nariz y/o boca.
Evitar compartir utensilios personales que tengan contacto con nariz o boca, para evitar el “contagio por gotitas”.
La mejor manera de evitar contraer esta enfermedad y en especial las complicaciones graves, es la vacunación.
¿Quiénes se deberían vacunar?
Embarazadas, a partir de la 13ª semana de gestación.
Niños y niñas de edades comprendidas entre los 6 meses a 5 años 11 meses 29 días.
Adultos de 65 años y más.
Trabajadores de avícolas y de criaderos de cerdos
Personal de Salud
Enfermos crónicos entre 6 y 64 años, portadores de alguna de las siguientes condiciones de riesgo:
*Diabetes.
*Enfermedades pulmonares crónicas, específicamente: asma bronquial; EPOC; fibrosis quística; fibrosis pulmonar de cualquier causa.
*Cardiopatías, específicamente: congénitas; reumática; isquémica y miocardiopatías de cualquier causa.
*Enfermedades neuromusculares congénitas o adquiridas que determinan trastornos de la deglución o del manejo de secreciones respiratorias.
*Obesidad Mórbida.
*Insuficiencia renal en etapa 4 o mayor.
*Hipertensión arterial en tratamiento farmacológico.
*Insuficiencia renal en diálisis.
*Insuficiencia hepática crónica.
*Enfermedades autoinmunes como Lupus; escleroderma; Artritis Reumatoidea, enfermedad de Crohn, entre otras.
*Cáncer en tratamiento con radioterapia, quimioterapia, terapias hormonales o medidas paliativas de cualquier tipo.
*Infección por VIH.
*Inmunodeficiencias congénitas o adquiridas.